Quiero que vayamos rompiendo el hielo y daros la bienvenida a los nuevos autores del blog, los alumnos de Introducción a la Historia del Arte de este segundo cuatrimestre del curso 2010-2011. Y quiero hacerlo con los bisontes de Altamira, ahora que abrimos el temario, y que justamente este fin de semana he podido ver en Cantabria. Me refiero a la réplica, la fantástica Neocueva que se ha construido para permitir a los visitantes acercarse a esta joya del arte del Paleolítico superior. Hace unas semanas Sergio Guardiola nos abrió el apetito hablándonos del museo de Altamira.
Nos habíamos propuesto pasar dos días en Santander y Santillana del Mar. El sábado despertó con un sol envidiable, como muestra la foto de la playa de Santander (prometo que no es una foto tomada en Alicante el verano pasado), de manera que nos lanzamos a pasear por la bahía y por su paseo marítimo hasta alcanzar la península de la Magdalena (un fantástico paraje natural con un magnífico palacio que se construyó como residencia de verano de Alfonso XIII).
Debo agradecer los buenos consejos que recibí para el viaje de parte de alumnos de Cantabria que tenemos en el grado de Historia, con una lista de lugares imprescindibles, tanto para el goce artístico como el culinario -el cocido montañés no tiene desperdicio-. ¡Gracias!
De Santander a la preciosa Santillana del Mar. Visitamos la colegiata de Santa Juliana, el museo diocesano, poco conocido pero que no hay que perderse (allí se concentra una espléndida colección de esculturas de las iglesias más remotas de la diócesis), y las cuevas de Altamira, a solo 2 km. de Santillana. La visita a la Neocueva es, de verdad, muy recomendable. Han hecho una reconstrucción perfecta de la cueva, a escala natural, junto a un museo de la Prehistoria de gran interés. El visitante se introduce por la cueva varios metros hasta alcanzar su máxima profundidad. Se abren ante él las maravillosas pinturas rupestres. Si no fuera porque no se aprecia el esperable olor a humedad, todo lo demás permite sentirse en la piel del primer descubridor de la cueva, Marcelino Sanz de Sautuola, que contempló por primera vez las pinturas en 1868, de la mano de su hija, María. Me impresionó el tamaño de los bisontes pintados, no sobre bajorrelieves, como yo pensaba, sino aprovechando realmente grandes protuberancias de la roca. Los bisontes y caballos parecen cobrar vida en medio de una manada. Y a uno le asalta la gran duda: ¿por qué fueron pintados hace aproximadamente 15.000 años?
De regreso recorrimos a pie un camino que parte de Altamira y que nos permitió deleitarnos con las vistas de Santillana del Mar.
¡Un viaje que os recomiendo a todos! ¡Buen inicio de cuatrimestre!
Diana Carrió-Invernizzi
Qué envidia, Diana!! yo estuve hace tiempo con amigos, es una tierra maravillosa. Lo peor fue que intentamos ir a Altamira pero no pudimos, por entonces fue cuando pusieron restricciones a la entrada y había que "pedir cita". Mi enfado vino una semana después, cuando vi a la selección española de fútbol (con Clemente por entonces al mando) visitando la cueva!!
ResponderEliminarBea M.
Desde luego... si es que no tenemos remedio. Siempre habrá clases... Bueno, espero que podáis volver pronto a ver la cueva. Para mí fue muy emocionante, algo para no olvidar.
ResponderEliminarDiana Carrió-Invernizzi
Qué divertida esa foto. Hace pocos años tuve la suerte de visitar la Neocueva y ...la cueva auténtica, que tuvimos la suerte de visitar tres personas. Fue mi segunda visita. La primera la hice cuando era niño, con mis padres y el acceso aún era público. Conservo un feliz recuerdo de ambos viajes.
ResponderEliminarHola a todos, recuerdo que cuando era pequeño mis padres también me llevaron a ver la cueva, pero ya casi ni lo recuerdo. Espero poder llevar a mi hija a ver la neocueva y el museo, y disfrutar con ella de esa maravilla. Es una pena Diana que no pudieras acercarte a Castro Urdiales, tiene también muchas cosas para ver y disfrutar. Hay por los alrededores cuevas que conservan arte rupestre, y con posterioridad fue un asentamiento romano. Con estos ingredientes voy a realizar una entrada en el blog para que todos podais disfrutar de éste mí pueblo.
ResponderEliminarHola Rafael:
ResponderEliminar¡Espero poder ir muy pronto a Castro Urdiales! Debe ser precioso, no tengo ninguna duda.
¡Esperamos tu entrada en el blog!
gracias,
Diana
Me gustaria informacion, si es posible el viaje esde Madrid hasta las Cuevas de Altamira? Cuanto es en tiempo el viaje?
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarDesde Madrid se tarda aproximadamente unas cuatro horas y media. Las cuevas se encuentran a escasos diez minutos de Santillana del Mar, otra joya artística, de manera que la visita de los dos lugares puede ser un buen complemento. ¡La impresión que causan las pinturas de Altamira es un auténtico regalo!
Un saludo,
Diana Carrió